Triste y sola
sola en la vida,
triste y sola
en la noche y el día.
A veces hablo sola
o escribo las cosas
que hago cada día,
pero haga lo que haga
siento pena en mi alma
y no se como calmarla.
Me falta cariño,
me falta amor.
Señor dame compañía,
una hija yo te pediría.
Para cuidarla y mimarla,
para tener algo en la vida.
Eso sería, Señor,
la más grande alegría.
Señor, la soledad no es buena,
te deprime, te da miedo, pena
y cada día te atormenta
y el alma apaga un poco cada día.
¡Ay Señor! ¡Dame esa compañía!
¡Concédeme esa alegría!
Para que no me sienta sola en la vida
y te estaría eternamente agradecida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario